Sobre los empleados públicos

La ocasión perdida para solucionar la huelga de la justicia reclama a gritos el arbitraje urgente

La ocasión perdida para solucionar la huelga de la justicia reclama a gritos el arbitraje urgente

Hace escasos instantes se ha hecho público que el plebiscito o consulta a los funcionarios de la Administración de Justicia durante largo tiempo en huelga ha mostrado el rechazo a la última propuesta del Ministerio de Justicia.

    1. En esta situación: Sevach lamenta que la oferta del Ministerio haya sido tan cicatera que no haya conseguido cautivar a los huelguistas, pese al agotamiento de los funcionarios y de sus nóminas. Diríase que Ministerio y sindicatos no hablan el mismo lenguaje o mas bien que no juegan con las mismas reglas (y me refiero a juego sin frivolidad, como licencia expresiva, ya que para los huelguistas lo que está en «juego» es nada menos que su trabajo y su dignidad). Veamos. El Ministerio parece jugar al póker y los sindicatos al ajedrez. Así, el póker es farol y audacia. Solo así puede tener sentido exigir el referendum en votación global a la propuesta ministerial. En efecto, conseguir aceptar ese planteamiento por los sindicatos es una trampa saducea (recordemos que los saduceos hicieron aquella pregunta a Jesucristo sobre si debían pagar impuestos, y la endiablada pregunta era una encerrona tanto si la respuesta era negativa como positiva).

    Y es que si el plebiscito fuera positivo (para lo que sin duda el Ministerio contaba con la debilidad de los huelguistas y la humana tendencia a volver al trabajo), el triunfo ministerial estaría garantizado al haber conseguido poner fin a una contienda interminable a precio de saldo, con gran regocijo del Ministerio de Hacienda.

    Y si el plebiscito fuere negativo, como ha acontecido, pues el Ministerio adoptará la pose de impotencia ante el sacrificio de las arcas públicas frente a las «insaciables» exigencias sindicales.

    Si a ello unimos, la complicidad de los medios de comunicación en cuanto a jalear al poder establecido y la siempre fácil crítica mediática a la figura funcionarial (máxime en tiempos de crisis económica), pues fácil resulta pronosticar el tanto a favor del ministro tras esta jugada de póker. Aunque no olvdemos que en el póker se gana una mano pero puede perderse a la siguiente.

    Sin embargo, los sindicatos juegan al ajedrez, donde impera la estrategia a largo plazo y la razón, y donde los sacrificios constituyen un camino hacia la meta.

    2. Así pues, en esta situación de bloqueo negociador, desconfianza recíproca y desgaste político y sindical, en que las víctimas son de un lado, los funcionarios judiciales de a pie, y de otro lado, los justiciables que ven como se amontonan sus papeles, solo cabe acudir al único sistema de solventar conflictos con equidad y dignidad. Me refiero al arbitraje urgente.

Hoy día los Estados mas encarnizados recurren a árbitros internacionales para solventar sus diferencias. La Administración admite la transacción para poner fin a los procedimientos administrativos, e incluso Hacienda promueve Actas con acuerdo para poner fin a las inspecciones. En el mundo de la justicia, todo el mundo sabe que mas vale un mal acuerdo que un largo pleito. Por eso, ahora es el momento de que ambas partes demuestre su flexibilidad y confien a un árbitro o a varios la resolución del conflicto de forma equitativa y desapasionada.

Sobran interpretaciones defectuosas del estado de las negociaciones, sobran criterios políticos, filtraciones a la prensa y algaradas. Basta con demostrar interés en solventar de forma justa y equitativa un conflicto de enormes proporciones. No hay tiempo que perder. Lo contrario es una irresponsabilidad. Y si los sindicatos proponen formalmente que se nombre un árbitro o árbitros a los negociadores del Ministerio, aquéllos estarían en su derecho para exigir que tal propuesta al menos sea sometida a refrendo, ratificación rechazo, por el mismísimo Presidente o el Consejo de Ministros. Ya no es tiempo de esconderse tras las cortinas de los negociadores ni del incienso burocrático.

No es difícil el arbitraje. Resolución independiente, rápida, y desapasionada. Da igual un arbitraje obligatorio, como un arbitraje voluntario, como un arbitraje informal con «pacto de caballeros». No ha sido difícil acudir al arbitraje con las huelgas del sector de la limpieza o la construcción o el transporte en ocasiones harto notorias, ni tampoco lo será si los árbitros (que pueden ser personas o instituciones) se limitan a deliberar con serenidad y sensatez: ¿Cual es el precio que pueden aceptar los huelguistas sin humillarles?, ¿Cual es el precio que debe pagar el Ministerio por conseguir que el servicio público no llegue a un punto sin retorno?. Pueden manejar las variables tiempo, cantidad o condiciones de trabajo. Resolver este conflicto con buena fe es un juego de niños. No hace falta ser Salomón. Y como telón de fondo, hay que pensar que al fin y al cabo, los huelguistas no reclaman por capricho sino porque es difícil mirar impasible como quienes han hecho el mismo esfuerzo de acceso (oposición) y mismo trabajo (oficina judicial) cobran diferente, y porque más difícil es mirarse al espejo y aceptar que tan duro y largo sacrificio por una causa justa resulta inútil, como difícil será afrontar el futuro y explicar a ciudadanos y familiares que los insultos y descalificaciones de la profesión de funcionario judicial eran excesos dialécticos propios de torpeza negociadora, pues mala estrategia es desacreditar a quien tiende dieciocho mil manos para negociar.

0 comments on “La ocasión perdida para solucionar la huelga de la justicia reclama a gritos el arbitraje urgente

  1. Sufridor

    Estimado Sevach:
    Sigo con habitualidad sus comentarios con los que unas veces estoy más de acuerdo y otras menos, como puede suponer.
    En el caso de la huelga de funcionarios de justicia discrepo de su postura en tanto en cuanto refiere únicamente la existencia de dos perjudicados («las víctimas son de un lado, los funcionarios judiciales de a pie, y de otro lado, los justiciables que ven como se amontonan sus papeles») y olvidas que además de ellos son muchos los procuradores y abogados que hace tiempo que no facturan un céntimo de euro por asuntos que están pendientes de resolución y, lo que es peor aún, no saben cuándo podrán hacerlo. Además aquí no hay descuentos proporcionales en futuras nóminas como ocurre con los ahora huelguistas (huelga en cómodos plazos, si se permite la expresión). Simplemente no hay un duro. Pero no queda ahí la cosa, pues como en cualquier momento pudiera desconvocarse (¡ojalá!) ello ha supuesto preparar en vano multitud de juicios, con testigos y peritos incluidos, que luego no se han celebrado, trabajo que habrá que repetir en su día. ¿Quién se hará cargo de estos, insoportables ya, perjuicios?. Nadie, como siempre.
    En cuanto al fundamento de la huelga (igual trabajo igual salario) es, en principio, totalmente justificado. Yo estoy totalmente de acuerdo y cuanto más gane todo el mundo, mejor. Lo que ocurre es que debemos acostumbrarnos a aceptar las desigualdades que dimanan de nuestro sistema político, territorial y competencial. No es cierto que seamos todos iguales. Yo, por ejemplo, no pago los mismos impuestos que un madrileño, ni tengo un AVE, pago el peaje del Huerna, mis hijos no tienen dentista en la S.S., los médicos de aquí no cobran lo mismo que los de Cataluña, los Policías Nacionales tampoco cobran igual que los ertxantzas o mossos de esquadra, ni un uxiliar admvo. del Ayuntamiento de Cintruénigo lo mismo que otro igual del de Toledo, etc, etc…
    O somos iguales o no lo somos. La respuesta es la segunda, pero ahora quizás sea ya demasiado tarde para darnos cuenta…

  2. Inlawwetrust.

    Le agradezco su comentario y su apoyo a una negociación a través de un árbitro, petición reiterada de los sindicatos, que no ha sido tomada en cuenta por el Ministerio.
    Son dos meses de huelga, sinceramente sentimos los perjuicios que ocasionamos, en primer lugar, a los ciudadanos, los más inocentes en esta lid, y a los profesionales, en segundo lugar. Los coloco en la segunda fila, porque nadie más que ellos conocen la grave situación estructural de la justicia, ellos son testigos y víctimas. Incluso en ocasiones aprovechan el descontrol en su favor, no les niego legitimidad en su forma de actuar.

    A Sufridor, señor mío, tanto en Talavera como en Xátiva, si usted tiene que demandar a una empresa por cualquier transacción mercantil, se tramita el mismo tipo de procedimiento del mismo texto legal, por funcionarios del mismo Ministerio, con igual categoría profesional, pero, curiosamente diferente sueldo porque tienen distinto gestor de recursos.
    Si le roban la cartera, cobra menos el funcionario que le atiende en Talavera que el de Xativa…usted verá. Pero ejercen las mismas funciones para el mismo patrón.
    No crea usted que vaya a encontrar muchos adeptos a su idea de aceptar desigualdades si afectan a personas exactamente iguales en cuanto al trabajo que ejercen. Pregunte Ud a cualquier sector laboral público o privado…hallará rápidamente las respuestas.
    Y otra cosa, no me quite usted la razón fundandose en otros colectivos en nuestra misma situación, ellos no reivindican, ya se darán cuenta de la gran pantomima que se ha creado con las transferencias.

    Cuanto más gane todo el mundo mejor, a simple vista, loable, pero es igual que decir viva la inflación.
    Cuanto mejor pagado esté un trabajador en función de su preparación y experiencia, mejor para mover la locomotora económica. Lo contrario, crea desidia laboral.

    Un saludo.

  3. Paloma

    Contesto respetuosamente al sufridor de las 7,35:

    Todos los huelguistas lamentamos profundamente todos los perjuicios que estamos ocasionando a todo el mundo con nuestra justa huelga y lo digo de corazón. Pero deberían reclamarle al Sr. Ministro de Justicia y a su equipo y en última instancia al Presidente del Gobierno por su cerrazón e incompetencia al no saber gestionar con generosidad y habilidad esta huelga.
    También quiero resaltar que si Ud. acepta de buen grado las desigualdades, yo no, no porque las haya quiere decir que sean justas. Por supuesto que yo no me comparo ni con un médico ni con un ingeniero, ni con un barrendero, etc, no sé lo que ganan ni quiero ganar como ellos, simplemente quiero ganar como un auxiliar que ha hecho la misma oposición que yo, y da igual donde viva en España. No se puede promover por un lado la igualdaZ y la solidaridaZ y con la otra mano promover lo contrario.
    Si el estado de las autonomias provoca desigualdades en el país, a mi entender eso no es bueno y como tal debería de arreglarse. Pero en España decir que algunas cosas que pasan en las autonomías son malas, te llaman fascista. Para mi es mucho más fascista provocar desigualdades. Hay cosas como educación, justicia y sanidad que no deberían de transferirse. Aquí ya pasan cosas como en Cuba, se acuerdan de la película «Guantanamera»? pues eso, que no puedes trasladar a un enfermo en ambulancia de una autonomía a otra porque no hay convenios entre ellas. Eso también pasaba en la España de principios de siglo XX, lean las novelas de la época, tanto avanzar para llegar a esto?!!
    Claro que no somos iguales, ud. es hombre y yo soy mujer, en el resto somos iguales, sobre todo los funcionarios de la Admon. de Justicia que somos el único cuerpo Nacional que queda ahora en España.
    Gracias.

  4. luis calvo

    Amigo Sufridor, no creo que debamos acostumbrarnos a aceptar las desigualdades, a que a los ciudadadanos de ciertos territorios sean convertidos en ciudadanos de segunda. Tal vez sea realista tu punto de vista, pero no me gusta creer en esto que afirmas. Si además de otros perjuicios que muchos atribuimos a la organización territorial autonómica, alguien cree que los territorios desfavorecidos van a aceptar por las buenas tales discriminaciones, creo que no conoce bien la naturaleza humana. Lo que pasa es que ciertos acontecimientos se van gestando con el paso del tiempo, cuando el malestar generado por las situaciones creadas se va generalizando. Por el momento, se puede observar que cada vez más gente siente que hay una vertiente de injusticia en todo esto. Comprendemos a los funcionarios de justicia en huelga, les deseamos el éxito porque su éxito es el nuestro y deseamos que detrás de ellos luchen por la igualdad otros trabajadores.
    Finalmente, también me gusta pensar que si la población lo desea no hay nada que no se pueda cambiar, que somos los dueños de nuestro destino. Aprobamos una Constitución en el año 78 y, no hay que descartar, que en su día, se pueda aprobar otra. Hay que darle tiempo al tiempo.
    Y como dice Sevach tendrá que ser un árbitro quien ponga fin a esta situación, porque el Ministro y sus cohortes parece que son incapaces…
    Mucha suerte a los funcionarios en huelga.

  5. Sevach

    Creo que todos deseamos el final de la huelga pero satisfactorio para todos, y aquí tiene razón «sufridor» de que debemos incluir a procuradores y abogados ( tal y como los mencioné en otros dos post anteriores sobre e tema), pero ya que nos movemos en el terreno de la justicia hemos de desear que la balanza pondere los intereses en juego: de un lado los intereses de huelguistas ( salario, dignidad) y de otro lado, los intereses del gobierno ( estrategia política hacia la Comunidades Autónomas, guiños hacia la ciudadanía por su dureza hacia los funcionarios, aviso de navegantes para otras negociaciones)…Y lo que no admite demora, ni tiene precio, que es una administración de justicia que, al margen de los inevitables errores, en la vertiente de las oficinas judiciales se ha caracterizado por su buen hacer ( al menos en los tiempos actuales y a tenor de la experiencia de Sevach y opinión de la ciudadanía).

  6. En relación con el comentario de sufridor, tiene razón en que la existencia de una organización territorial del Estado con Administración General del Estado, CCAA y entidades locales, estando dotadas las segundas de amplios poderes, también legislativos, hace que hay diferencias, también en la retribución de los empleados públicos. Esas diferencias, partiendo del mínimo común fijado en la Ley de Presupuestos Generales del Estado, son comprensibles si hablamos de cuerpos y escalas o categorías propios de cada Administración. Por ejemplo, que los funcionarios del cuerpo de auxiliares administrativos de la Junta de Extremadura cobren más o menos que los funcionarios del cuerpo de auxiliares administrativos del Principado de Asturias, se puede entender, porque entra dentro del margen propio de la política de cada Gobierno, pagar más o menos, respetando las retribuciones comunes a todos. Ahora bien, los funcionarios de Justicia pertenecen a cuerpos nacionales al servicio de la Administración de Justicia. Pese a la transferencia de la gestión de esos cuerpos a las CCAA, siguen pertenciendo a esos cuerpos, no se integran en cuerpos autonómicos, y esa circunstancia, unida a la realizaicón de idénticas funciones, e idéntimo régimen jurídico regulador, hacen que sea exigible que haya una armonización salarial.

  7. Sufridor

    Estoy francamente encantado. Veo que estamos todos de acuerdo en la cuestión de la igualdad. Simplemente me he limitado a poner varios ejemplos como prueba de las desigualdades que produce el sistema. Yo no me conformo. Yo no acepto las desigualdades y me parece fantástico que pensemos como Paloma y Luis Calvo, que eso es algo que se puede cambiar. ¿Estamos vivos? Siendo realista creo que este movimiento pudiera ser de importancia si tuviera éxito y continuidad en otros sectores. Quizás sea el momento de una nueva revolución. Pero el amorcillamiento y el conformismo es la regla general (empezando por uno mismo). El sistema político y las pétreas e intocables estructuras de los partidos lo impiden. En temas así y cuando se refiere a sus sueldos y privilegios, no hay quien tosa a los políticos.
    Por otro lado y como todos tenemos derecho a comer, la situación de abogados y procuradores veo que no ha despertando tanto interés como la cuestión anterior. Y ahí, en la solidaridad, es donde está una de las bases fundamentales de las revoluciones. Veo que hay poca…. Aún así, gracias por escucharme y contestarme.

  8. Sufridor

    Ah! Inlawwetrust, el procedimiento administrativo es «común» y el auxiliar de Xátiva y el de Talavera siguen idéntico expediente para tramitar una petición de licencia para cambiar un tejado en uno y otro sitio. El administrado no vería diferencia alguna si no fuera por los membretes de los folios. y qué decir del trabajo de uno y otro médico según la Comunidad. Claro que el patrón es distinto (¿distinto?). ¿Por qué ha de ser distinto un Ayuntamiento de otro?. Aquí el meollo está en el «gestor» como Vd. dice, pero eso es consecuencia del sistema y en esto me remito a lo dicho. Lástima que sólo seamos en Asturias una pequeña y humilde comunidad que no da para un CiU, un ERC o un PNV que son los que mandan. ¡Pues yo no me conformo!

  9. JuanFran

    Una huelga que sale gratis al huelguista, que se le hace a un gobierno en funciones y que encabrona al ciudadano, tiene todos los visos de sacar frutos, pero ni mucho menos los que serían justos o esperados.

  10. fernando

    Como funcionario de justicia en huelga quiero efectuar unas reflexiones al hilo de los comentarios anteriores:

    1.- En primer lugar, y por enésima vez, pedir disculpas a los afectados directamente por esta huelga indefinida: a los ciudadanos en general y afectados en particular, porque es cierto que esta situación es gravísima y afecta directamente a uno de los poderes del Estado. A los abogados y procuradores, porque es cierto que ellos sufren directamente los efectos económicos de esta huelga, y también lo es que, por lo menos aquí en Asturias y salvo casos contados, están mostrando una actitud comprensiva con los motivos que nos han llevado a la misma. Sin embargo, y respecto a Sufridor -al que agradezco de veras que demuestre que la discrepancia no está reñida con la educación, algo que en muchos momentos se ha echado en falta-, señalar que creo que criticar la oportunidad de una reivindicación laboral por los efectos que causa la misma es negar su propia legitimidad. No nos engañemos, sabemos que las huelgas al final las pagan los ciudadanos en su día a día, basta recordar los cortes de tráfico que se realizan por determinados colectivos desde el primer día de sus movilizaciones, las vacaciones frustradas por huelgas de pilotos o controladores, etc, etc … es decir, todos estos efectos son inherentes a toda movilización, y sobre todo cuando ésta tiene una larga duración …

    2.- Por otra parte, y respecto al tema de los descuentos, una precisión: en esta huelga se han descontado en la nómina del mes de marzo los días de huelga de noviembre y dicienbre de 2.007 (2 días) y el 4 y 5 de febrero: la razón de ello es que en las gerencias territoriales del ministerio se cierran las nóminas el día 5 de cada mes, lo cual es competencia de esos departamentos, con lo cual no se nos puede achacar esa circunstancia.

    3.- Respecto al fondo del asunto, y a la vista del estado actual del conflicto, urge una solución urgente: es decir, el ministerio debe tomar de inmediato la decisión de convocar a los sindicatos a nueva mesa de negociación y mantener en la misma una actitud abierta, presentando una propuesta seria y dejar de verter infundios sobre las pretensiones de los trabajadores, como la que propagan en el sentido de que se quiere sacar el trabajo atrasado en horario laboral y cobrar por ello horas extraordinarias (un contrasentido absoluto, si son extraordinarias por definición son fuera del horario ordinario). Evidentemente hay que articular medios o planes para recuperar este atraso, que a día de hoy no es cuantificable por mucho que diga el ministro que en cinco o seis meses estará todo como antes -lo cual demuestra su conocimiento del asunto-, pero lo que no es de recibo es que en la propuesta ayer rechazada mayoritariamente únicamente se haga referencia a ello de pasada … asimismo se ha ofrecido la mediación de una persona o entidad independiente desde hace muchas semanas, constantemente rechazada por el ministerio en todo este tiempo.

    En fin, nada más que agradecer a Sevach su atención, y a todos los intervinientes sus argumentos y educación. Gracias de veras.

  11. MARIANA

    Muy interesante la entrada y los comentarios. Me gusta leerlos porque asi me entero de muchas cosas. Yo no añadire nada mas sobre ello. Tan solo quiero plantear unas preguntas respecto al «referendum» celebrado en las ultimas horas.
    -¿Quienes deberían haber sido convocados ? ¿Todos los funcionarios? ¿Solo los funcionarios que han secundado la huelga? En este segundo caso, ¿cuantos dias de huelga habria que haber hecho para tener opcion al voto?
    Todo esto viene a cuento porque, a los funcionarios de mi Juzgado – un Juzgado de Paz -nada se nos comunico y cuando ayer por la mañana llamamos para ver como teniamos que emitir el voto se nos contesto que «solo podian votar quienes habian hecho huelga».
    -«Pero, nosotros hemos hecho huelga, no todos los dias, pero hemos hecho huelga», respondimos
    Se nos disculparon como pudieron y nos dijeron que,…bueno, que podiamos ir a votar hasta las 13 horas.
    Yo me abstuve inmediatamente. Lo mismo hicieron mis compañeros y se nos plantearon estas dudas para las que nosotros tenemos una respuesta pero quiza no sea la correcta.
    Agradeceria una respuesta.
    Un saludo

  12. Sevach

    Lo cierto, Mariana, es que las disfunciones y exclusiones indebidas de la participación en el llamado «referendum» son inevitables por lo atípico de que una negociación que cuenta con sus representantes, tenga que verse respaldada por una votación asamblearia ( y mas atípico que tal respaldo lo imponga la parte empresarial). Y digo inevitables porque, a diferencia de los procedimientos electorales ordinarios no se garantiza ni el tiempo de reflexión, ni el debate, ni el control de quienes tienen o no derecho a votar, ni el sentido de un voto en blanco o de la abstención,etc. Sin embargo, lo relevante es que a la vista del resultado ( al margen de las formas, mas o menos apropiadas) se ha rechazado la propuesta del Ministerio. El problema vendría dado si tal rechazo fuese por una mínima diferencia de votos y entonces sí que habría problemas gravísimos sobre quién pudo votar y quién no. En fin, gracias por todos los comentarios.

  13. Mariana

    Muchas gracias, Sevach, por la rapida respuesta. En realidad nuestros votos no emitidos hubieran aumentado un poquitin más la diferencia en los resultados.
    Todo esto nos ha confirmado, una vez más, que con algunos compañeros solo se cuenta cuando interesa. Lo tenemos asumido, pero duele.
    Gracias de nuevo.
    Un saludo

  14. Luis B. R. (Oviedo)

    A Juan Fran:
    Con respecto a su «comentario» sobre «La ocasión perdida para solucionar la huelga de justicia reclama a gritos el arbitraje urgente» he de decirle:
    Esta Vd. en un craso error -y para opinar y comentar creo que uno debe estar INFORMADO CORRECTAMENTE-
    1º) La huelga a los funcionarios NO NOS SALE GRATIS (ni jamás pretendimos que así fuera -por lógica-).
    2º) No se hizo a un Gobierno en Funciones, toda vez que data de ABRIL DE 2.007 y ya el 15 de Noviembre y 14 de Diciembre se hicieron sendos días de huelga (QUE YA NOS DESCONTARON) y en esa «época» el Gobierno no estaba en funciones, otra cosa es que NO HAYA FUNCIONADO -como ya comenté el 27-3-08 a las reflexiones del Sr. Sevach «De la necesaria generosidad ministerial paraponer fin a la huelga de funcionarios judiciales antes de que sea tarde» de fecha 25-3-08.
    Juan Fran: documéntese, que «esto» lo leen muchas personas y las puede confundir, no se si adrede ó involuntariamente por su parte.
    Otra vez más, ¡ GRACIAS!, Sevach.

  15. Mariana

    De nuevo aqui. Acabo de escuchar que el ministro de Justicia ha dicho que el referendum de ayer fue un fraude porque se ha excluido a aquellos funcionarios que no hicieron huelga cuando, lo que se decidia, a todos concernía. Veo que, desde mi ignorancia, algo no me sonaba bien y no andaba muy equivocada. Esperemos que esta metedura de pata no traiga peores consecuencias.
    Un saludo

  16. Creo que el Ministro está lanzando una cortina de tinta como los calamares para quitarle legitimidad a nuestra votación. También ha dicho que el referendum era solamente para «ratificar lo acordado». Empiezo a pensar que la actitud del Ministro se parece a la de un «boxeador sonado», y poco le falta para caer sobre la lona. En cualquier caso, Mariana, tus compañeros lamentamos que tú y otros como tú hayan tenido problemas para votar, pero al final no podemos dejar que esa anécdota ( aunque supongo que para tí es importante) nos estropee el duro camino hacia nuestras metas.

  17. William H. Rehnquist

    Amigo sufridor:
    Quiero expresar mi más profunda solidaridad contigo y con tus opiniones. En efecto, los colectivos de letrados y procuradores son quienes más directamente sufren la huelga, especialmente estos últimos, y los grandes olvidados en este conflicto. Los procuradores llevan prácticamente dos meses sin cobrar un duro, y únicamente se acuerdan de ellos para solicitarles ayuda económica con el fín de paliar la situación económica de los funcionarios en huelga. Y a todo ello debemos añadir que nuestros clientes no entienden de huelgas ni parecidos, y día tras día acuden a los despachos a interesarse por la marcha de sus asuntos y a expresar su indignación por los retrasos (ante lo cual yo, en el ejercicio de mi libertad y no deseando ser muñeco de pim pam pum en este conflicto, he optado por remitirlos al juzgado y que se peleen directamente con los funcionarios, pues no estoy dispuesto a responder de situaciones que no me son imputables).
    Desde el profundo respeto a todas las opiniones vertidas en este foro (funcionarios y afectados; a favor y en contra), me gustaría lanzar las siguientes reflexiones:
    1) ¿Por qué los Colegios de Abogados y Procuradores no organizan igualmente una caja de resistencia para ayudar a los colegiados más afectados por esta parálisis judicial?
    2) ¿Estarían los funcionarios en huelga dispuestos a ser «solidarios» con estos colectivos y ayudarlos económicamente si éstos les pidiesen ayuda?

  18. Esther

    A Mariana.

    Soy funcionaria con destino en los Órganos Centrales, te puedo decir que en Madrid los Sindicatos después de realizar huelga el día 14 de diciembre de 2007, y a la vista de que a pesar deque con los dos días sueltos de huelga que se habían realizado, no habían conseguido acercar posturas con el Ministerio, pasaron por todos los Juzgados unos cuestionarios preguntándonos si estaríamos de acuerdo en la convocatoria de una huelga indefinida, si la secundaríamos, y si queríamos hacerla en días alternos o consecutivos, a dicha encuesta contestamos una gran mayoría que SI secundaríamos la huelga indefinida y que queríamos que fueran días CONSECUTIVOS para así demostrar al Ministerio que nuestra intención era en todo momento apoyar a los sindicatos pues creíamos y muchos aún creemos que nuestra reclamación es justa, legal y además acorde a la máxima que el partido socialista ha llevado como emblema de su campaña «a igual trabajo igual salario» (aunque esto claro y a la vista de los resultados, parece que solo se debía referir a la empresa privada, cuando el pagador era un empresario, y no para la Administración).

    El resultado fue que una mayoría bastante amplía acordó la iniciación de la huelga, convocándose la misma con los trámites que legalmente se exigen, y dictándose unos servicios mínimos que para unos eran escasos y para otros excesivos, sobre todos en destinos cuya plantilla ya de por sí es mínima y cuyos servicios debían cubrirse por la totalidad de la plantilla.

    Una vez iniciada la huelga y aunque esta fue votada por mayoría, hubo personas que haciendo uso de su derecho fundamental de no hacer huelga no secundaron la misma, y por lo tanto continuaron trabajando.

    Ahora se produce la ironía de que esas mismas personas que no han hecho huelga tienen que tener DERECHO a votar para decidir si los que llevamos realizándola desde el día 4 de febrero de forma continuada, podemos seguir secundando la huelga haciendo, también, uso de nuestro derecho fundamental; pues no nos engañemos, no tiene ningún sentido que los que no han hecho huelga ni sufrido las consecuencias de ella (descuentos, desgaste físico y moral, vejaciones, retenciones, agresiones, insultos…) puedan votar para aprobar un proyecto de acuerdo que solo se ha conseguido después de muchos días de huelga y reuniones infructuosas con el Ministerio y además, para más INRI, puedan decidir si los demás seguimos o no en huelga, pues si el Gobierno considera que con sus votos podrían conseguir una aceptación (cosa que me parece improbable dada la mayoría aplastante por la que ha ganado el NO entre los que secundamos la huelga) a la vista de la aceptación ya no tendría sentido seguir la huelga.

    A mí personalmente, como una simple funcionaria de la Administración de Justicia, no me parece ético que dichas personas puedan votar para aceptar un acuerdo que condicione que yo continúe la huelga, y dudo mucho que pueda tener una fuerte fundamentación legal; por lo que rogaría al Sr. Sevach, que tiene tanto conocimiento del Derecho, como ha venido ha venido demostrando en los distintos artículos publicados en su blog, me sacará de esta duda y me indicase si puedo estar tan equivocada, pues a veces lo que parece justo no siempre es lo legal.

    Pido disculpas al Sr. Sevach por lo extenso del comentario, dándole las gracias por sus comentarios sobre el colectivo del que formo parte, y felicitándole por un blog tan ameno.

    Un saludo de una funcionaria desencantada y desilusionada.

  19. maribel

    A Mariana

    Estoy totalmente de acuerdo con Esther,

    Yo también soy funcionaria con destino en un Juzgado al que las noticias de la Huelga llegaron tarde pero aún así me incorporé a dicha huelga a pesar de no tener respaldo de mis compañeros, pues soy y he sido la única que he secundado la huelga en mi Juzgado. A pesar de que ya he pasado por esto hace 8 años, en la Comunidad Autónoma de Canarias, donde también luché desde el primero hasta el último día de Huelga para conseguir ganar unos 120 euros más al mes al terminar la huelga, y con unos descuentos de 800 euros aproximadamente

  20. Desde Palma con amor

    Agradecerle Sevach en primer lugar su tiempo, su apoyo y sus claros comentarios; como ya dije en otro post anterior soy funcionaria de la Administración de Justicia en huelga desde el 4 de febrero.
    Todos conocemos ya los resultados de la consulta realizada a los trabajadores en huelga, también conocemos los altos porcentajes de participación en la huelga, por más que el Ministerio, con la connivencia de determinados medios de comunicación, se empeñe en desvirtuarlos. Tanto es así, que dudo que aún votando la totalidad del censo de funcionarios hubieran variado mucho los resultados; por un lado porque los que estamos en huelga somos una holgada mayoría y por otro porque estoy convencida que la propia coherencia habría impedido acudir a las urnas a aquéllos que han decidido por propia voluntad no secundar la huelga, o dejar de realizarla tras determinada tiempo; y digo esto porque entiendo yo, que si el funcionario X en ningún momento ha secundado la huelga es porque no tiene interés alguno en el resultado que se obtenga de ella, y de haberla secundado, una vez apartado del conflicto, y ejercido su derecho a no hacer huelga, ha transferido a sus compañeros huelguistas la responsabilidad de solucionar el conflicto y por tanto de decidir sobre él, esto parece ser lo más justo, ahora bien, coincidiendo con Esther puede que no sea lo ajustado a derecho. Por otro lado, desconozco el modo de proceder en una situación así en cuanto a la votación del pacto, me pregunto como se ha resuelto este conflicto en otras huelgas, acaso los trabajadores del metal cuando hacen una huelga llaman a votación a todos los trabajadores?, porque siendo así, podría darse la paradoja de que unos pongan la leña y el cordero en el asador y otros cómodamente se lo coman, además de decidir si lo quieren lechal o les basta ovejero.
    En cuanto a la rueda de prensa del ministro Bermejo en la que literalmente ha dicho en relación al referéndum: «Que solo vengan a votar los que están en huelga y se ha privado del derecho de voto y por tanto de decidir su futuro en la relación laboral a todos los demás, esto tiene nombre en derecho es un incumplimiento contractual y un verdadero fraude», decir que de entrada debería explicar que quiere decir con incumplimiento contractual (y no voy a entrar en el presunto fraude), me han comentado que se podría hablar de incumplimiento contractual si el pacto hubiera variado la relación contractual entre empleado y empleador, pero nunca si en el pacto se contiene una mejora del contrato, si es así, en este pacto no se habla de variar la relación contractual; leído punto por punto, a mi me lo parece, muy por el contrario, se hablaría en todo caso de mejorarla, en tanto en cuento se está reconociendo un aumento en el salario, amén de otras cuestiones. De todas formas y como totalmente lega en la materia, le ruego Sevach nos conceda un poco más de su tiempo y nos aclare esta cuestión que para muchos tiene enorme importancia, puesto que como funcionarios de Justicia, nos gusta movernos en todo momento en el marco de la legalidad.
    Un saludo de una funcionaria en huelga

Gracias por comentar con el fin de mejorar

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