Informatica y Derecho

¿ Conseguirá el Derecho proteger los datos personales en Internet o nunca alcanzará el Coyote al Correcaminos?

correcaminos

Dicen que quien hace la Ley hace la trampa. Sin embargo, Internet es una selva repleta de trampas que la Ley no es capaz de detectar o combatir eficazmente. La dificultad básicamente obedece a tres factores. En primer lugar, el carácter transfronterizo o globalizado del tráfico de información por la red. En segundo lugar, la velocidad tecnológica que abre incensantemente posibilidades (procedente del ingenio tanto de científicos con bata como de simples usuarios con ordenata). Y en tercer lugar, la condición humana que hace ser confiados y temerarios en la cesión o confesión de los datos privados.

Por eso, la entrevista que este domingo (18/1/09) ofrece en el diario La Nueva España el prestigioso abogado asturiano Ramón Robles pone el dedo en la llaga al hacer un espléndido repaso de los desafíos y peligros que encierra Internet a la intimidad y la privacidad. Es tal su interés que Sevach resumirá, en adaptación libre y con su particular estilo, las líneas principales del discurso:

1º Toda la información y de todos está en Internet. La Agencia Tributaria, la Seguridad Social, el Servicio Público de Salud…Todo está ahí como un enorme hipermercado de información privada.

2º La normativa sobre privacidad no es homogénea en todo el mundo. Y si no hay homogeneidad no habrá acuerdo internacional sobre las medidas coercitivas. O sea, la práctica impunidad está servida en todo vínculo a través de Internet que tenga incidencia o conexión con elemento internacional.

3º Las compraventas a través de Internet se sustentan en las garantías del vendedor y del comprador. Sin embargo, el líder del sector, el mercado de subastas de eBay no garantiza ni la identidad del vendedor ni la realidad del objeto subastado. A ello se suma que, en caso de litigio, los problemas de competencia jurisdiccional son disuasorios de las posibles demandas(¿juzgados del país del vendedor o del comprador, o del lugar desde donde se concierta la operación?

4º La ausencia de policía especializada en internet. Aunque hay una modesta unidad de delitos telemáticos, el campo de la cesión inconsentida de datos o en perjuicio de terceros es Territorio Comanche. Las redes sociales (Facebook, por ejemplo) son terreno abonado para manipular la información o adoptar medidas conjuntas de resonancia nacional o internacional (protestas, demandas, plataformas,etc).

5º La empresas proveedoras de redes sociales carecen de rostro y son engañosas. Las condiciones para que el usuario de de alta su perfil personal son extensas, confusas y leoninas. Una vez que el usuario cumplimenta los datos e integran el perfil quedan abandonados a su suerte en el océano cybernético. Detrás de un simple “clic” se vende la intimidad del alma al diablo.

6º La inundación de publicidad. Las “cookies” que brotan de las redes sociales, como de miles de páginas web, analizan gustos y tendencias y los ceden a terceros con lo que la publicidad atosigante está servida.

7º La indexación (o inclusión de páginas web y de perfiles en buscadores) permite el acceso indiscriminado e indebido de terceros a aspectos sensibles de la intimidad y personalidad.

8º La información vertida en redes sociales, o en cualquier otro soporte (web, Chat, blog, youtube, etc), o que sea capturada desde Google, susceptible de lesionar la imagen o la intimidad de la persona (algún antecedente negativo, por ejemplo), cobra vida propia y resucita a la vista de todos, sin que el Ordenamiento Jurídico posea reflejos para conseguir su inmediata retirada. Cuando se consigue resulta laborioso, el mal está consumado y resulta prácticamente imposible impedir que vuelva a repetirse la difamación .

9º La propiedad intelectual, en su vertiente de creación literaria, musical, fotográfica y videográfica, se ha debilitado hasta convertirla en una propiedad puramente moral, ya que la rentabilidad económica vinculada a la reproducción se ha esfumado por la facilidad e impunidad de traficarla en la red. De ahí que el dato personal de la paternidad de una obra artística es susceptible de manipulación y usurpación.

10º La lucha del Derecho contra hackers, spammers, contrabandistas de datos y otros canallas es como la persecución de avispas con cañones. Inútil y risible.

En definitiva hay un inmenso mundo en Internet y allí en la espesura acechan muchos peligros para la intimidad, para la privacidad o la seriedad de las transacciones. El Derecho actúa como un coyote bueno incapaz de capturar al Correcaminos.

Un paso de gigante se daría si a nivel europeo, o mediante la legislación interna de cada Estado, sin rodeos se calificase como dato personal la dirección I.P. que identifica cada ordenador. Resulta fácil ser formalista y decir que una dirección I.P. identifica una cosa (al igual que una matrícula identifica un coche pero no al conductor) pero lo cierto es que, salvo ordenadores de acceso público (cybercafés, Universidades, salas de centros sociales o culturales y similares), la inmensa mayoría de las direcciones I.P. permiten sin gran esfuerzo interpretativo identificar a la persona que lo maneja y que debe responsabilizarse del mismo. Y si se es responsable para lo malo de lo que sucede con el propio ordenador, también se asumirá su titularidad para lo bueno, y tendrá derecho a ser protegido si un tercero utiliza y difunde ese dato tan singularizado (IP). Al fin y al caso, la dirección I.P. es la llave que permite acceder a la puerta de la casa del hombre moderno, e identifica o permite identificar con pequeños rodeos personas con nombres y apellidos.

En definitiva, las empresas que manejen tales datos ajenos deberían observar las garantías propias de los datos personales (información sobre la recogida de datos, consentimiento par su tratamiento o cesión ,etc). Es cierto que Google y Yahoo se oponen a esta interpretación, de igual modo que MacDonalds en su día se oponía a explicar a sus clientes del contenido en grasas de sus hamburguesas. Pero todo se andará.

Así y todo, se está caminando en la dirección correcta. Por un lado, la Directiva comunitaria 2002/58/CE ha impulsado las garantías del derecho a la protección de datos en los servicios de comunicaciones electrónicas disponibles para el público. Y por otro lado, en la reciente Conferencia Internacional de Autoridades de Protección de Datos y Privacidad (Estrasburgo, del 15 al 17 de octubre de 2008) se adoptó una importantísima Resolución sobre la urgente necesidad de proteger la privacidad en un mundo sin fronteras, y de alcanzar una propuesta conjunta para el establecimiento de estándares internacionales sobre privacidad y protección de datos personales.
Además de invitar a los Estados miembros del Consejo Europea que no lo hayan hecho a ratificar el Convenio 108 del Consejo de Europa para la protección de las personas con respecto al tratamiento automatizado de datos de carácter personal y su protocolo adicional, se acordó crear un Grupo de Trabajo para sentar principios y armonizar criterios en la materia. En particular a Sevach le gustaría resaltar las utílísimas Recomendaciones que formularon en la misma que deben seguir los usuarios así como los proveedores para evitar el zoco de información en que se están convirtiendo algunas redes sociales como Facebook, Tuenti o Mypace.

En fin, confiemos en que el sueño del futuro que le espera a Google que ya fue pronosticado por Sevach no se convierte en pesadilla.

0 comments on “¿ Conseguirá el Derecho proteger los datos personales en Internet o nunca alcanzará el Coyote al Correcaminos?

  1. Creo que la respuesta al interrogante de Sevach es claro: Nunca el Correcaminos (bip-bip, como los ordenadores) será alcanzado por la Ley, mientras los procedimientos de acuerdo en la Unión Europea y dentro de cada Estado sean tan lentos y exasperantes. Mientras tanto,» a río revuelto, ganancia de hackers y traficantes de datos».

  2. Magnífica entrada.

    Internet es una realidad nueva y además extremadamente compleja… tan compleja que la falta de regulación adecuada y suficiente se debe a que internet «ha roto todos los moldes»….

    Esta misma web, el blog, es una continua fuente de información acerca -no sólo- de su autor, sino de su pensamiento, su opinión doctrinal, etc….

    A nadie nos pasa, por ello inadvertido que quien escribe las entradas es alguien -que identifica- que está detrás de un pseudónimo….

    Si yo firmara cada una de estas entradas con mi nombre y dos apellidos mis opiniones podrían ser citadas por terceros, y ser usadas en mi contra.

    Si en esta página interviene, por ejemplo, un Magistrado del Constitucional y da su opinión jurídica sobre un tema y además la firma, no creo que sea tan fácil que pueda después desdecirse de esa opinión….Igual pasaría con un catedrático…

    Otra cosa que podría plantearse es si realmente la opinión es de tal persona o es otra que ha usurpado su nombre, que ha elegido ese «nick» o que curiosamente se llama igual.

    El caso de las redes sociales es algo cuyas consecuencias son difíciles de aquilatar…Yo he sabido de su existencia hace muy poco tiempo, y no me ha quedado más remedio que darme de baja de una de ellas cuando he visto que a un amigo le han montado una campaña dentro de la red social (facebook) imputándole opiniones que no son suyas.

    Las compraventas que podemos hacer por ebay varían bastante de las que se describen y regulan en los tratados de derecho romano…Y las incidencias fiscales que pueden tener este tipo de compraventas no precisamente fáciles de regular y gestionar.

    De otra parte los poderes públicos comienzan a entender a internet como algo generalizado y «obligatorio»…y lo cierto es que están propiciando que estemos aún más enganchados y enredados:

    -¿Alguien se acuerda cómo se hace una declaración de la renta rellenando los impresos?
    -¿Cómo se consultan los puntos del carné de conducir…?
    -¿Cómo se gestionan e incluso justifican determinadas subvenciones?…Sólo a través de internet…si no me funciona el navegador o la conexión me quedo fuera de una convocatoria…¿Es esto acorde a los principios del Derecho Administrativo y legal? ¿Se pueden restringir los derechos que quien sea megatorpe o tenga mal instalado el javascript o el navegador?

    No hay normas claras que nos obliguen a usar internet, pero de hecho se nos «obliga»…Y luego nos encontramos con cosas que no tienen sentido como el hecho de que la Ley de Contratos del Sector Público prevea múltiples perfiles del contratista cuando tendría que haber previsto uno solo como es el BOE, que desde el 01/01/2009 es una web más.

    Si de lo que se trata es de lograr la mayor transparencia posible no hay nada más eficaz que establecer una web única obligatoria para toda la contratación administrativa….

    Otro capítulo, como bien señalas, los chats y los programas de mensajería instantánea…Hacemos amistad con personas que no conocemos, y les damos «por escrito» todas nuestras conversaciones, opiniones, etc….etc….¿Alguien imagina algo más inseguro?

    Creo que el derecho tal como hoy lo entendemos a nivel mundial se enfrenta a un reto difícil de superar….

  3. Me convence la inquietud de Sevach ante los riesgos que encierran las nuevas tecnologías. La pregunta crucial es si no es prioritario para los políticos promover acuerdos internacionales o Leyes que directamente y sin rodeos atajen estos problemas que ya son realidad.¿Quién no ha vsto sus datos personales regados por la red, o bombardeado con spam?

    Muy bueno el comentario de Ummj. Merecería ser un post independiente.

  4. Saludos y buen dia

    He de decir que es un magnifico articulo como casi todos
    vamos qe nos tienes muy mal acostumbrados cuando baje la calidad ZAsss jajaaj

    Una cosa hablabas de una propuesta a nivel europeo o algo parecido , y la verdad que no lo veo nada mal , lo que yo no usaria la ip de una computadora ya que esta puede variar constantemente como es el caso de los cybercafes y demas que tienen una direccion dinamica normalmente provista por un servidor DHCP como haz mencionado en el articulo pero la idea no esta nada mal yo optaria por el DNI Electronico o algun metodo parecido como los que ofrece VerySign o algo asi
    aunque claro eso entraria en choque con la libertad que siempre ha existido en internet y seria matar la red de redes

    que hay que protegernos en la red , POSITIVO que hay que intervenir la red para enriquecer a unos pocos MALO Y MUY NEGATIVO porque al final lo que se lograria si se impusieran metodos asi es que X personas y no las mas adecuadas sean las que controlen la red

    por eso siempre los estados le han tenido puesto el ojo a la red porque no pueden contralarlo a sus anchas

    y espero que siga siendo asi y que internet siga tan libre como siempre

    y si decia que lo que planteabas del mecanismos de indentificacion nome parecia mal solo para los casos mas estrictos como las compras por internet , la identificacion de las empresas en lascuales e compra si son legales o no ,pero es lo mismo de siempre han habido casos en los que la tienda fisica de la esquina de tu barrio que parecia muy legal y confiabas en ella resulta que te han estado robando dinero porque grabaron los datos de tu tarjeta o los prodcutos que venden no estan certificados no las entidades correspondiente y demas

    por eso que internet siga como siga

    Sin mas me despido

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