El recurso de casación irrumpirá en lo contencioso-administrativo antes de un año, tal y como abordé en un reciente post. Una buena manera de aproximarse al fenómeno es la de prestar atención al recurso de casacion tal y como está diseñado en otros países con larga tradición en abrir o cerrar las puertas del «interés casacional».
Recordermos que la nueva regulación entrará en vigor antes de un año, aunque intuyo que el legislador por un lado, aplazará su vigencia, y por otro, completará su regulación en lo que se refiere a la «casación autonómica», huérfana de criterios y con dificultad para forzar la analogía de la «casación estatal».
El nuevo modelo gira en torno al «interés casacional», y un alambicado sistema donde por un lado, hay supuestos en que es potestad «cuasigraciable» la admisión del recurso, de manera que puede inadmitirse por simple Providencia (expeditiva y sin motivación sustancial alguna), y por otro lado hay supuestos en que se «presume el interés casacional» (cuestion de invalidez de disposición general, acuerdos de órganos reguladores, actuación autonómca ¿?, y los dos realmente interesantes: si no hay jurisprudencia o si la sentencia se aparta deliberadamente de la existente) pero en estos supuestos no está vinculado al Tribunal por lo bastará un auto motivado para denegarlo (art.90). En suma, es previsible que estemos ante un inmenso casino judicial, donde todos los abogados ante las sentencias desfavorables (de única o segunda instancia) jugarán a la ruleta y con similares probabilidades de acierto (o admisión).
Y así, sobre la problemática en la formación de jurisprudencia a través del recurso de casación, mi admirado procesalista italiano Michelle Taruffo ofreció a mediados del año pasado en la Facultad de Derecho y Ciencias Políticas de la Universidad Inca Garcilaso de la Vega, en Perú, la conferencia magistral «La Casación, el Vértice Ambiguo». Clara, deliciosa y con gran valor para comprender el sentido y génesis de la jurisprudencia por las Cortes Supremas. Además curiosamente hoy el Diario La Ley publica un estupendo artículo del abogado Jorge Pérez Alonso titulado El nuevo sistema de casación en el orden contencioso-administrativo operado por la Ley Orgánica 7/2015 de 21 de julio: con la vista puesta en el certiorari estadounidense.
Por eso aquí tenéis el video, teniendo en cuenta que va precedida por una estupenda ponencia sobre el valor de la formación humanística en los juristas, pero arrancando el profesor Taruffo con su conferencia en el minuto 58. Disfrutadla si tenéis tiempo. No se trata de teorías ni dogmas sino de perspectivas generales cargadas de sentido común.
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