Me disponía a hacer propósitos veraniegos de hacer deporte e intentar recuperar la ya perdida línea no apolínea. Me preguntaba por la razón de que siendo un disciplinado jurista en cuanto a leer, esforzarme y dedicar tiempo y energías al derecho, no aplicaba igual actitud espartana al cultivo del cuerpo.
Y entonces me percaté del caso inverso, de que realmente la actitud deportiva podía ser útil para el derecho. Así que divagando sobre ello, como es propio de la época, me propuse hacer un video sencillito de dos minutos de duración exponiendo cierto paralelismo entre deporte y abogacía, y que pudiera servir de enseñanza a los novicios y de guiño a los veteranos.
NOTA- Como complemento para curiosos y estudiosos, aquí tenéis una docena de videos (breves, amenos y gratuitos… ¡Vaya tres palabras!) sobre la abogacía y el derecho. Un kit audiovisual para el abogado del siglo XXI.
Pero reconozco que lo que me maravilla son los consejos de Coppola para ser un abogado de cine…
Buenísimo, un fiel reflejo de nuestra profesión y lo mejor lo del «bar», lugar que cura todos los sin sabores, siempre que se este con buena compañía y no se abuse…
Un saludo.
Muy bueno Sevach, grandes consejos pero sobre todo nunca olvidar la toga… 🙂
Buen fin de semana a tod@s
Jamás he conocido a nadie con tanta pasión por el derecho como JR Chaves. Tengo una duda, que me gustará encontrara respuesta : en lo mas profundo de ese alma de jurista….¿Chavez se siente mas abogado o mas magistrado?
Gracias, he sido y creo que soy ambas cosas. Es como responder si se quiere más a mamá o papá, o a quien debes más. Difícil. Lo importante es que el tronco común es el cultivo del derecho.. y la confianza en la justicia que lo inspira. Un saludo afectuoso
Lo mismo me pregunto yo.
Cualquier artículo jurídico me vuelve loco y dejo casi cualquier cosa para disfrutarlo.
La conclusión es que el derecho se ha convertido en mi hobby.
Y aunque si soy abogado de vocación tardía, mi trabajo discurre en el ámbito forestal, el cual ya me aburre un poco.
Así que el tiempo disponible, a leer cuestiones jurídicas, quedando del lado el deporte.
Feliz verano
Muchas gracias por aportar inteligencia y humor -si no es lo mismo- en época de crispación y desencuentro. 👏👏👏
Mi barriga aumenta al mismo ritmo con el que se me olvidan los conocimientos jurídicos aprendidos y este año he tenido que hacerme una nueva toga porque ya no cabía en la anterior.
Tras 18 años de ejercicio siguen incólumes mi pasión por la profesión y mi confianza en la Justicia. Respecto de la deportividad y el ejercicio de la abogacía digamos que añoro tiempos pretéritos. Ahí lo dejo.
Estimado Sr. Chaves, es un usted un auténtico Frank Capra de la Justicia y una de las mejores personas que, sin conocer, conozco. Por ello no es de extrañar que su visión de la Abogacía sea tan afectuosa, positiva, bien intencionada y ajena de dobleces.
Pero, lamentablemente, la vida mancha. Y si de algo adolece la Abogacía hoy en día, dicho sin generalizar y en mi muy humilde y desencantada opinión, es de deportividad. Al punto que la deontología y caballerosidad, trasunto del término deportividad en nuestro ámbito profesional, han pasado a mejor vida. Siendo literalmente arrasadas por el más puro mercantilismo, la más atroz competencia y la más desvergonzada y/o engañosa publicidad, que son a la Abogacía lo que el doping y la corrupción al deporte. Antes nos quedaba el espíritu amateur de ciertos deportes. Hoy casi ni eso.
Sr . Chaves, le felicito por el vídeo y por todos sus artículos . También le sigo en su blog personal «vivo y coleando»
Particularmente ha llamado mi atención y me ha gustado mucho en el vídeo , su frase «lo importante en un litigio no es vencer, sino no ser vencidos por nuestra propia incapacidad»… Al final, creo que el mayor litigio es con nosotros mismos, donde empezaría la justicia, donde tendremos que velar por ella, desde dentro hacia afuera… feliz fin de semana…
Apenas leí el titulo de la entrada, me fue la cabeza directamente a una ponencia del profesor Carlos García Torres sobre el Derecho romano, en la que usa el término Deportividad como sinónimo de ligereza y poca laboriosidad de un trabajo jurídico, o como dicen nuestros colegas francófonos un trabajo «ococotte minute»,
Un saludo.
Pingback: Abogacía y Deportividad – Rika Herrera
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