Al igual que los deportistas suben al podio de vencedores, por haber conseguido proezas, y mas allá de los 30 mejores juristas de ha historia, situándonos en la actualidad española, se me ocurre pensar en clave humorística qué letrados merecen estar en el podio de los administrativistas por sus logros.
Veamos…
En primer lugar, medalla de oro, al que consigue que le admitan un recurso de amparo
En segundo lugar, medalla de plata, al que consigue que el estimen un incidente de nulidad de actuaciones.
En tercer lugar, medalla de bronce, al que consigue que le admitan un recurso de casación bajo el nuevo interés casacional.
Ya sabemos que no puede todo el mundo interponer todos los recursos y que todos sean admitidos y resueltos con el consiguiente overbooking judicial junto al colapso de los ciudadanos que nunca verían situaciones firmes o con cosa juzgada. También sabemos que el diseño de los medios de impugnación y recursos, tal y como se ha lavado las manos el Tribunal Constitucional, es cosa del legislador y este puede abrir la válvula o cerrarla a capricho.
Además cuando estudiamos derecho nos enseñaron que la meta es la justicia aunque también la seguridad jurídica, y que para obtener una victoria jurídica había que pasar por un campo de minas procesal.
Lo que no se nos dijo nunca es que si ya es difícil la estimación de un recurso administrativo, un contencioso-administrativo mucho más, y que prosperen los recursos indicados ya es cosa de acudir a Lourdes o Fátima.
En fin, quede este post como alegato para consolar a un amigo abogado con el que me he tropezado y estaba desconsolado.
NOTA DE SOCIEDAD.- Recuerdo, y pido disculpas de antemano por la insistencia, que el próximo jueves, 31 de enero de 2019 a las 19,00 horas tendrá lugar la presentación en Madrid de mi último ensayo «El arte de la guerra en la Justicia administrativa«(Wolters Kluwer) en la REAL ACADEMIA DE JURISPRUDENCIA Y LEGISLACIÓN DE ESPAÑA, C/ Marqués de Cubas, 13. Aquí está la invitacion con el número donde hay que llamar para inscribirse por las limitadas plazas (902 250 500). Como ya dije en la convocatoria, para mí será un placer reunir abogados, juristas y amigos (condiciones no incompatibles) para hablar con libertad del derecho y la justicia.
¿El segundo bronce y el tercero plata? Tal vez la cosa no sería tan dificil si, como en la mayoría de paises civilizados, tuviéramos por habitante la mitad de abogados que ahora y una cuarta parte de pleitos. Coincido en que en la judicatura hay quien deja mucho que desear, como en todas partes, y que ni TS ni TC se lucen precisamente a la hora de afinar jurídicamente en lugar de hacer ejercicios de voluntarismo, pero la saturación brutal que existe no ayuda lo mas mínimo. El buen abogado tiene complicado destacar y que se le preste atención a sus alegatos cuando está rodeado -o mejor, sumergido- en un proceloso océano de mediocres compañeros, litigantes querulantes insaciables y además tiene que reunir la tripleta de tener suerte con el juez, que éste no esté sobrepasado, y que el asunto tenga enjundia jurídica. Si existiera la profesión de busca-agujas en pajares, muchos buenos abogados que conozco tendrían mas posibilidades de éxito en ella que en la que ahora ejercen.
Saludos
Aprovecho la entrada para un pequeño desahogo ante la notificación de una providencia que inadmite a tramite un recurso de casación contencioso administrativo cuando debía, por imperativo legal, haber adoptado la forma de Auto, al estar preparado sobre un supuesto del 88.3.a) LJCA, si alguien localiza una sentencia, una sola de un expropiado que precisamente por la demora en la determinación del justiprecio haya entrado en concurso de acreedores por favor que la reseñe. El alto tribunal no considera suficientemente justificado dicho extremo, ¿Cómo lo justifico? si precisamente no existe jurisprudencia y lo que solicito es que se pronuncien en base a esa nueva labor que tienen encomendada. Que para nada sirve si los tribunales superiores de justicia que han de aplicarla no tienen nivel ni vocación para redactar sus propias sentencias y acuden al copia y pega.
Si frustrante es de por si la inadmsión, no menos lo es por sus formas, redacción, ausencia de un mínimo interés en lo que se está resolviendo que provoca se escriba mal el nombre del cliente, que reflejen mal la cantidad discutida, que menos que por el Alto Tribunal se cuiden dichos detalles, que lo son todo para quien lleva 10 años batallando contra Goliat,
Inadmisión recogida en media carilla tras 8 meses de espera en la sección de admisión,
Ya no hay que tener amigos jueces, sino amigos en el gabinete técnico del TS,.. quienes realizan la criba a los magistrados, que solo admiten lo que aquellos le dicen… según sea de algún conocido, medie alguna que otra contraprestación, o el humor con el que amanezca.
¿Merece la pena una nulidad de actuaciones? a sabiendas de su desestimación pero, necesaria para acudir a Estrasburgo, aunque ello suponga que mis clientes sigan sin recibir un justiprecio de una expropiación iniciada en 2011, en tanto no adopte firmeza la sentencia del TSJ.
Expropiación que se ha llevado por delante una gran empresa, sin derecho a indemnización por considerar el TSJ QUE ESTABA CERRADA A LA FECHA DE VALORACION -2011- POR ESTAR EN CONCURSO, cuando la misma fue liquidada tres años más tarde, 2013, por ser la siguiente fase del concurso, pero en funcionamiento su actividad hasta el ultimo día.
¿Alto Tribunal? ¿Justicia? ¿Vocación? ¿Merito? ¿Capacidad? ¿Tutela judicial efectiva?
Toca valorar con objetividad, qué es lo mejor para mis clientes, si, renunciar a lo que les pertenece y le han arrebatado o, continuar esta batalla a sabiendas de que el TS no rectifica, pero con la esperanza de Estrasburgo.
No me considero abogado de busca- agujas, sino una creyente en la justicia y en el bien común, el esfuerzo y la perseverancia y siento que en este país, no solo en nuestra profesión, cada día hay menos profesionales involucrados en su labor y, para los que todo vale.
Gracias por permitirme este «pequeño» desahogo.
Si consigue que le admitan el recurso ante el TEDH habrá obtenido la medalla de platino de los abogados; si no lo consigue, al menos le anticipo que los modelos de inadmisión del TEDH son mucho más cuidados en la forma y más extensos que las cutres providencias de inadmisión del TS y TC.
Su ‘desahogo’ nos da a conocer ciertas ‘perversiones del sistema judicial’ que nos deja con una rabia contenida y ‘mala leche’ por las injusticias que cualquier persona, como en este caso a sus clientes, puede llegar a sufrir. Desde aquí mandarles todos los ánimos posibles y como otro lector animarles a ir a Estrasburgo, si sus recursos se lo permite.
Y por supuesto dar las gracias al magistrado por seguir criticando lo malo de la justicia, del sistema judicial y sus integrantes, y como es obligado a aquellos legisladores de probada mediocridad. La crítica y autocrítica es lo que nos puede ayudar a mejorar a nosotros y a veces al resto.
Querida compañera de penas, bien te entiendo, revisa cuidadosamente si la obra que dio origen la expropiación fue financiada con Fondos Comunitarios pues no olvides el delito de fraude de subvenciones si el dinero fue a otra partida presupuestaria cuan do era para la autovia de turno. Mucho ánimo y no decaigas porque los abogados somos luchadores innatos.
«Proceloso océano de mediocres compañeros» ¿Se aplican Vds el cuento? Mientras el acceso a la judicatura se base exclusivamente en la capacidad memorística,, seguiremos teniendo jueces penosos, semianalfabetos, iletrados y mediocres.
Estimado Jose Manuel, el acceso a la judicatura es un filtro mejor o peor, pero posterior a ser ya licenciado (graduado) en derecho. Por lo que según su propio razonamiento, tenemos licenciados en derecho penosos, semianalfabetos, iletrados y mediocres, salvo que crea vd. que de repente y por el solo hecho de aprobar la oposición un licenciado en derecho encomiable, culto, letrado y destacado se convierte en lo contrario. Ya he dicho que hay quien deja que desear, como en todas partes, y me ratifico en ello, no es un sistema perfecto, pero tampoco es distinto de la propia licenciatura o grado (Es mas intenso, eso sí) y no veo que se critique a los abogados por ello. En cuanto a la capacidad memorística, no es ni mucho menos lo único, pero es complicado de entender para quien no ha pasado una oposición. Es como los curas hablando del sexo, vamos. Saludos
Me pongo en lugar de su desconsolado amigo Abogado.
NUESTRO SISTEMA JUDICIAL ES : Anclados a la poltrona de por vida, sin responsabilidad alguna, y después de acceder a la plaza sin interés alguno por continuar formándose, -salvo excepciones-.
Quien dijo que la justicia es ciega. No solo es ciega, ademas ES SORDA, mientras se habla, DESPUES DE MUCHO ESTUDIO, impunemente pueden estar hablando de un partido de fútbol, y atrévete a decir algo, que jamás en la vida vuelves a ganar un pleito.
Así nos va y nos irá. No hay separación de poderes. No hay Justicia. No hay Constitución, mas lejos de un simple papel mojado. ESTO ES LA OPINION DE LA MAYORIA DEL PUEBLO, EN CUYO NOMBRE SE EJERCE LA JUSTICIA.
LO DICHO………………………………… SE LO DEBISTES CON TODO RESPETO DECIR A TU DESCONSOLADO AMIGO ABOGADO, que ninguna duda tengo, que se lo curró de lo lindo, y es un buenisimo Abogado, a pesar de no obtener ni medalla de oro, de plata o de bronce. LE DEBISTES DECIR QUE LO IMPORTANTE ANTE EL PANORAMA EN QUE NOS ENCONTRAMOS; LO IMPORTANTE ES LA SATISFACCION PERSONAL, DE HABER CUMPLIDO CON SU TRABAJO.
No estamos en tiempos en los que un Abogado que interpone un pleito tenga certeza jurídica alguna de que lo va a ganar. LA MAYOR PARTE DE LAS OCASIONES ESTO SE HA CONVERTIDO EN UNA ESPECIE DE PRIMITIVA, SI TE TOCA GANAS Y SI NO……………………..y por eso hay tantos abogados, porque incluso sin razón les puede TOCAR LA RULETA………………………………..
UN SALUDO.
No soy juez, pero… ¡Cuánta complacencia en los abogados! El nivel de los jueces puede no ser bueno, aunque discrepo de ello, pero de lo que no hay duda es que el nivel medio de los abogados da vergüenza ajena. Eso sí, capacidad de autocrítica 0
Y qué eres? Que experiencia tienes para hablar así de los abogados? En todas las profesiones hay de todo, pero lo que si es una constante es que, cada vez es más difícil la admisión de los recursos de casación y de amparo, aunque el tribunal de instancia se haya pasado por el forro la jurisprudencia reiterada del Tribunal Supremo, que se limita a inadmitir recursos diciendo que sobre esa cuestión ya existe mucha jurisprudencia,Ya, pero es que el Ponente del TSJ no la ha aplicado porque no le ha dado la gana, pero resulta que el Supremo exige que el Magistrado diga expresamente que no la aplica, vamos que reconozca casi, casi que prevarica. Y en eso no tiene la culpa el abogado
Y de lo de la inadmisión del amparo, ya ni entro.
Es el «elefante en la habitación» de la Justicia. En todas las profesiones jurídicas hay buenos, malos y medianos, pero entre los abogados, el 80% (no menos) carecen de la competencia mínima para ejercer pasablemente su profesión. Probablemnte nadie lo diría en público, pero todos sabemos que es cierto.
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Un post muy valiente… sí señor. Prueba de ello el debate que ha generado. Como dicen en catalán: «algú ho havia de dir!» (alguien lo tenía que decir). A veces hay cosas que todos vemos, sufrimos… y callamos como si fuese normal. Es ya tal el nivel de «tolerancia» que tenemos, el nivel de resignación, que las damos por «normales». Que las nulidades flagrantes cuesten tanto de admitir… denota seguramente como somos los humanos. Que magistrados y letrados no puedan «saberlo todo» denota que la «Justicia», la autodenominada «administración (en el sentido de «impartición») de Justicia» aplica un Orden conplejisimo e imperfecto. Que las «altas instancias» sean sarcófagos sin llave… Parece justo. Que los grandes usuarios de la Justicia
sean empresas cuya finalidad es recibir dinero y no pagar… y tengan incentivos para ello, no solo por la ausencia de ‘punitive damages’ y la «escrupulosidad» de algunos juzgadores a la hora de valorar la falta de concurrencia de requisitos para aplicar la condena en costas, sino peor aún la inmoralidad de muchos ¿la mayoría? de los usuarios de la «Justicia» (personas con sus egos y egoísmos)… Hacen de este mundo… un lugar en el que ser Juez, y además con cientos de causas por resolver al año y pequeños equipos de trabajo no siempre a pleno rendimiento… imagino, debe ser tan pero que tan difícil. Así es, creo, este mundo… hastahque venga el Nuevo. No obstante, de mientras, al menos hay la «Administración (pública) deJusticia»…
¡Tú te callas y ya está.! Nunca ha existido un remedio procesal más denostado que el Incidente de nulidad de actuaciones, no sólo por su inconcreción e interpretación entre lo heterodoxo y lo descabellado, por lo excepcional y subsidiario en la cacareada amplísima defensa de los sacrosantos derechos fundamentales, sino porque en la mayoría de los casos convierte objetiva y subjetivamente al Juez en Juez y parte. Existen afortunadamente Jueces y Magistrados dispuestos a enmendarse si su conciencia y sentido de la Justicia en relación con los motivos de impugnación le dictan la necesidad de rectificación, si bien la estadística no se prodiga en evidencias. El recorte del recurso de amparo ante el Tribunal Constitucional ha frustrado las últimas expectativas de los justiciables vilipendiados y lo ha convertido en el camello que intenta pasar por el ojo de la aguja. La configuración del anormal funcionamiento del T.C. ni siquiera respeta la debida congelación de rango introduciendo a este una nueva función jurisdiccional en una Ley ordinaria. El error judicial una quimerita, el anormal funcionamiento de la Administración de Justicia un «begin the beguine» una nueva carga inútil e insoportable de nuevo viacrucis, gastos y tiempos, amén del «mandato» del TS llamando a los Juzgadores a no convertir a la Administración en una aseguradora universal. Ahorramos reiterar críticas al nuevo régimen de admisibilidad de la casación. El Tribunal Europeo de Derechos humanos dice pero no hace. Superado por su éxito, intenta nuevas formas de reducir su colapso con decisiones de inadmisión inmotivadas contrarias al art. 45 del convenio y del derecho al recurso eficaz ex art. 13, veneno metastásico que ya implementan con naturalidad y automatismo tirios y troyanos, administrativos y judiciales.
Si rectificar es de sabios, a la vista de la defensa a ultranza de las resoluciones firmes merezcan o no revisión o nulidad, bajo las barricadas de la cosa juzgada y la seguridad jurídica, corremos el riesgo de escalar en la estulticia. La Justicia es algo más que un juego procesal en el que se pueden guardar ases en la manga. Nadie puede discutir las fórmulas honestas de modular la sobrecarga cuando las impugnaciones sean manifiestamente improcedentes o se atisbe la mala fe por cualquiera de sus formas, ni el castigo a la temeridad o a la negligencia, pero es necesario impedir que el diablo,la comodidad o la impotencia carguen las armas procesales. Lo dijo el Rey en Venezuela y mi amigo José María, autointitulado chupatintas al servicio de la Administración de Justicia, de momento, ¡Tú te callas y ya está.!
Y que te estimen unas medidas cautelares en sede contencioso en qué podium se encuentra?
Felicidades por el blog profesor
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