La Revista Actualidad Jurídica Aranzadi, con difusión en abierto, ha tenido la amabilidad de incluir en su número 992, jueves, 26 de enero de 2023, mi breve artículo de opinión titulado «Ser competente en época de incompetentes», donde aludo al uso equívoco de lo que llamamos competencia y lo fácil que es identificar a alguien competente, y más fácil al incompetente.
Aquí está la revista accesible, con mi artículito en la página 6 y acompañado de artículos de otros solventísimos autores.
Y es que si hay que hacer algo, hay que hacerlo bien, ni «casi» ni «parecido», ni «luego». Las coartadas del impostor. Ser competente en la abogacía no es ganar casos sino prestar el servicio como si fuera para interés propio, aunque no se gane. Ser competente como juez no es ser infalible sino esforzarse en dar razones y que se entiendan. Ser competente como fiscal no es ser implacable sino ser sensible a la singularidad del caso. Ser competente como funcionario no es defender siempre la cosa pública, sino saber escuchar, impulsar y explicar. Ser competente como académico no es ser un gurú autocomplaciente sino alguien que se forma para enseñar, que enseña a aprender y que investiga para sumar. Y ser competente como autoridad pública no es ser prepotente ni partidista, sino sentir que el cargo es temporal, quien lo ejerce mortal (memento mori) y se ejerce con responsabilidad.
» Ser competente como juez no es ser infalible sino esforzarse en dar razones y que se entiendan.»
En Guadalajara y en Albacete hay jueces y fiscales que aseguran, sin cita de ley ni sentencia, que nada obliga, ni siquiera jurisprudencialmente, a un alcalde a ordenar la inspección de hechos puestos de manifiesto como infracción urbanística mediante el ejercicio de la Acción Pública Urbanística. Ni más ni menos.
Me pregunto por qué el legislador se esforzó en aportar al art. 320.1 del CP la jurisprudencia que forzó la inclusión del texto «omisión de inspecciones obligatorias».
Habrá que esperar a una nueva generación de jueces y fiscales para que Guadalajara deje de ser «territorio Comanche».
Ergo, la mayoría de jueces, fiscales, gobernantes y funcionarios resultan ser incompetentes, por lo menos al hilo de esos criterios, que por otro lado, comparto plenamente
Se puede ser competente prevaricando por corporativismo , y , además , hacerlo bien para dejar todas las puertas cerradas , aunque si tienes buenos contactos , tampoco hay que preocuparse , no pasará nada. ¿Ser competente en qué y en qué dirección? Lo mismo o peor por ser más fácil ser competente, el fiscal y el funcionario competente. Me da más confianza quien aplica el derecho justo que el competente en no sé qué. Si que estoy de acuerdo en la definición «Ser competente como académico no es ser un gurú autocomplaciente sino alguien que se forma para enseñar, que enseña a aprender y que investiga para sumar».